Los logos son arte y deberían estar en los museos, según el consumidor. El 62% de los consumidores cuelga a los ubicuos logos la etiqueta de obras de arte (y su favorito es el de Coca-Cola). Los logos acechan al consumidor prácticamente en cada esquina y éste, lejos de aborrecerlos, les pone gustosamente “ojitos”. No en vano, a ojos del público, los logos son mucho más que meros emblemas para dar cobijo al branding (visual) de las marcas y son auténticas obras de arte. Así lo concluye al menos un reciente estudio llevado a cabo en Reino Unido por Avery UK.

El logotipo al que prodigan un amor más ardoroso los consumidores es el de Coca-Cola. Pese a cargar con más de 130 años sobre sus espaldas (o quizás precisamente por ello), el logo de la célebre y longeva bebida refrescante es el favorito del consumidor.

La medalla de plata en el particular ranking de Avery UK se la cuelga otro logo con fama (merecida) de icónico: el de McDonald’s.

Acompaña, por otra parte, a Coca-Cola y McDonald’s en el podio el logotipo del entrañable Mickey Mouse de Disney.

Completan el Top 10 de Avery UK los logos de Cadbury, Apple, Nike, Guinness, LEGO, Michelin y la marca de tés e infusiones PG Tips.

De acuerdo con el informe de Avery UK, que pulsó la opinión de 2.000 consumidores, los logos son habitualmente lo primero en lo que se fija la gente cuanto decide fijar su mirada en un producto, cuyo nombre e incluso su color quedan relegados a un segundo plano habiendo un logotipo de por medio.

En línea con este dato (del que las marcas deberían tomar nota), el 46% de los consumidores estima que los logos son definitivamente el aspecto más “duradero” de una marca.

Pese al creciente auge de las marcas blancas, lo cierto es que el 33% de los consumidores (enamorados quizás hasta el tuétano de los logos) compran única y exclusivamente marcas que les resultan familiares. Y el 53% afirma que la familiaridad (emanada en buena medida de los logotipos) se traduce en una mayor confianza hacia las marcas.

Por otra parte, y dejando a las claras que el consumidor bebe abiertamente los vientos por los logos, el 62% de la gente cuelga a estos la etiqueta de obras de arte.

Fuente: https://www.marketingdirecto.com